Remedios caseros para todo tipo de pieles/ Consigue una piel perfecta con estos trucos naturales.

La parte del cuerpo que más nos preocupa a la hora de cuidarnos es el rostro. Buscamos una piel joven, luminosa pero libre de brillos, sin granitos, manchas o cualquier otra imperfección.

Encontrar el tratamiento adecuado para nuestra piel es bastante complicado, no existen dos tipos de piel exactamente iguales, por lo que un mismo tratamiento difícilmente tendrá los mismos efectos en personas distintas. 

Si bien la fórmula secreta todavía no la hemos encontrado, hemos querido recopilar las mascarillas y otros remedios caseros más efectivos a la hora de tratar la piel grasa, seca, madura, con imperfecciones o, simplemente, para conseguir una limpieza perfecta. ¡No te lo pierdas!

Mascarilla para una limpieza profunda

Ingredientes:

  Miel (Conoce los beneficios de la miel y la canela con este post)

  Avena: actúa como jabón y antioxidante.

  Agua caliente

Pasos:

Mezclar utilizando una licuadora media taza de agua caliente, un cuarto de taza de miel y media de avena.

Aplicación:

Huntar el producto por toda la cara y esperar unos diez minutos.

Importante:

Lavar con agua tibia. Se recomienda su utilización a las personas con cualquier tipo de piel, a excepción de aquellas que sufran alergia a cualquiera de sus ingredientes. 

Exfoliante natural

Ingredientes:

  Miel

  Azúcar

Pasos:

Mezclar una cucharada de miel y una de azúcar. 

Aplicación: Con movimientos circulares y esperar quince minutos para que el producto actúe intensamente. 

Importante:
Utilizar tres veces por semana.

Mascarilla para limpiar y cerrar poros

Ingredientes:

  Pepino

  Leche en polvo

  Clara de huevo

Pasos:
Licuar el pepino y agregar una cucharada de leche en polvo y una clara de huevo, mezclando hasta que se cree una pasta densa. 

Aplicación:
Extender por el rostro y dejar actuar durante media hora.

Importante:Para intensificar sus efectos, recomendamos enjuagar primero con agua tibia y, posteriormente, con agua fría. ¡Notarás la diferencia!

Mascarilla contra el acné

Ingredientes:

  Fresas: por su alto contenido de ácido salicílico.

  Clara de huevo

  MIel de abeja

Pasos:
Triturar con la ayuda de un tenedor un cuarto de taza de fresas, media clara de huevo y una cucharada de miel de abeja. 

Aplicación:
Aplicar en el rostro y dejar reposar durante al menos veinte minutos. 

Importante:
Retirar con agua fría para conseguir un resultado muy visible.

Tratamiento para la piel seca

Ingredientes:

  Cacahuetes

  Miel

  Limón

  Aceite de soja

Pasos:
Triturar dos cucharadas de cacahuetes y mezclarlos con media cuchara de miel, zumo de un limón y un chorro de aceite de soja. 

Aplicación:
Extender sobre la piel del rostro y esperar unos quince minutos para que la mezcla penetre y actúe. 

Importante:
Aclarar, transcurridos los quince minutos, utilizando agua tibia.

Loción para blanquear la piel

Ingredientes:

  Perejil

  Agua hirviendo

Pasos:
Picar un puñado grande de perejil, introducirlo en un recipiente de vidrio y añadir media taza de agua hirviendo. Dejar que la mezcla repose durante media hora y colocarla en un recipiente de plástico. 

Aplicación:
Una o dos veces al día, evitando siempre las horas de exposición solar.

Importante:
No deben utilizar este remedio las personas alérgicas y se puede guardar durante al menos cuatro días en el refrigerador. 

Mascarilla antiarrugas y antienvejecimiento

Ingredientes: 

  Aceite de Oliva: hidrata, reafirme y da suavidad.

  Miel de abeja: antioxidante, antiséptico, antibascterial, es un excelente humectante y ayuda a luchar contra el envejecimiento.

  Clara de huevo: humecta la piel, elimina el acné, los puntos negros o espinillas, el exceso de brillo, da elasticidad, disminuye los poros y afirma la piel.

  Aloe vera: Elimina las manchas del acné, las provocadas por el envejecimiento o las que aparecen durante el embarazo, cicatrizante, antioxidante, buena para la flacidez, aclara la piel...

  Limón: astringente, tonificante, aclara la piel, elimina manchas...

Pasos:

Añade una cucharada de cada ingrediente en la licuadora y licua poco a poco en periodos de pocos segundos para evitar que la clara del huevo se convierta en espuma.

Aplicación:
Limpiar la piel intensamente, batir el envase en el que introduciremos nuestra mezcla y aplicar por todo el rostro y escote (evitando el área de alrededor de los ojos), retirar con un paño a toquecitos y lavar de nuevo la cara. 

Importante:
No exponerse al sol durante su aplicación ya que podrían aparecer manchitas y ser constante.